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Incertidumbre, el virus que avanza sobre las democracias. (Publicado en Infobae 29/9/2019)

04.05.2020 - Internacionales

“La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados”. Esta gran definición no pertenece ni a Platón, ni a Santo Tomás, tampoco a Churchill.

Su autor fue Groucho Marx, y es probablemente como veremos a continuación, una radiografía tomada a la realidad política de las principales potencias mundiales.

El presidente de los Estados Unidos enfrenta un pedido de juicio político por parte de la oposición parlamentaria.

El primer ministro de Gran Bretaña acaba de ver cómo la Corte Suprema de Justicia de su país le impide lograr su principal objetivo político, el Brexit.

El presidente de Rusia observa con gran preocupación el avance de movimientos democráticos opuestos a su régimen, sumado a los renovados pedidos de transparencia en su gestión del gobierno.

A pocos días de cumplirse 70 años del nacimiento de la República Popular de China los líderes occidentales analizan con preocupación los 143 acuerdos de cooperación con 122 países que la potencia oriental firmó hasta finales del año pasado, provocando un gran desafío competitivo en el comercio mundial.

España tendrá el próximo 10 de noviembre su cuarta elección general en cuatro años por no poder formar gobierno.

Italia desde el fin de la Segunda Guerra Mundial tuvo 29 jefes de gobierno con una duración promedio de 405 días, mientras que Alemania en ese mismo período sólo tuvo nueve cancilleres federales.

Corea del Norte constituye junto a la República de Irán una amenaza nuclear permanente para las grandes potencias occidentales que aún no han logrado establecer una posición común para impedirla.

Por último, Venezuela vive la peor crisis económica y social de toda su historia con un éxodo de habitantes, el segundo a nivel mundial después de Siria, que alcanza casi al 15 por ciento de su población.

Sumada a esta enumeración de importantes países que padecen serias crisis políticas, aparece en las tapas de los principales diarios del mundo una ambientalista sueca de 16 años que fustiga desde la sede la ONU a los líderes mundiales, acusándolos de desidia para enfrentar la crisis del cambio climático. Dos días después del discurso la joven es galardonada con el Premio Right Livelihood de 2019 conocido como el “Premio Nobel Alternativo”, que fuera establecido en 1980 para “honrar y apoyar a las personas valientes que resuelven problemas globales”.

Hasta aquí una breve descripción de la situación política mundial, la que se traduce en un concepto que la engloba y la define con mayor precisión: incertidumbre.

Heisenberg, el gran teórico de la incertidumbre

El creador del principio de incertidumbre fue el físico y filósofo alemán Werner Heisenberg, ganador del Premio Nobel de Física en 1932, con solo 31 años de edad.

De acuerdo a este principio teórico, la propia observación de un fenómeno genera modificaciones en él, lo que hace imposible medir simultáneamente y con máxima precisión el valor de la posición y la cantidad de movimiento de una partícula determinada.

Heisenberg nació en 1901 y murió en 1976. Fue ayudante de otro científico alemán, Max Born, quien obtuvo también el Premio Nobel de Física en 1954.

A lo largo de su carrera académica mantuvo contacto con los principales científicos de su época, entre ellos Albert Einstein y el danés Niels Bohr, que había tenido como profesor al británico Ernest Rutherford.

Con el auge del nazismo, Heisenberg profundizó sus investigaciones sobre la construcción de armas atómicas al amparo del gobierno alemán. Hasta el día de hoy los historiadores no se ponen de acuerdo en cuál fue la verdadera motivación que llevó al científico a viajar a Dinamarca en septiembre de 1941 para explicarle a su colega y amigo Bohr los secretos del programa nuclear nazi que dirigía Albert Speer.

Hasta su muerte producida en 1963, Bohr no dio su versión personal sobre el encuentro con su colega y amigo alemán quien a su vez tampoco dejó una explicación certera sobre el objetivo y el contenido de su visita a Copenhague.

La relación profesional y de amistad entre Heisenberg y Bohr fue llevada al teatro en 1998 con gran éxito de público hasta hoy por el escritor inglés Michael Frayn, recibiendo una excelente crítica de Aage Bohr, hijo de Niels, que también como su padre fue galardonado con el Premio Nobel de Física en 1975.

El filósofo español Daniel Innerarity expresa con meridiana claridad la esencia del sentimiento de incertidumbre que se desparrama sobre el mundo a pocos de días de que se cumplan 90 años del llamado Crac del 29, sucesos críticos que hoy parecieran estar a la vuelta de la esquina. “Hace no muchos años el debate era si los cambios se producían en nuestras sociedades mediante la revolución o la reforma. Actualmente el cambio no se produce ni por lo uno ni por lo otro, ese ya no es el debate, sino por un encadenamiento catastrófico de factores en principio desconectados.”


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